domingo, 27 de marzo de 2011
Bridge Of Surrender
Yo no creo que puedas seguir estando alli.
Cuando veo su sonrisa todo sobre el puente todo parece tambalearse y ni hablar de cuando la miro a los ojos y ella comienza a preguntar si somos de mundos diferentes.
"Por favor, hazme entender" dice y todo comienza a girar alrededor de la cama.
Pero yo no puedo comprender esta situación, aún estoy con ella y parece que ya comienzo a extrañarla. Cual será el hechizo que utilizó esta vez?
Trató de hallar mis ojos pero ellos estaban posados sobre el cielo. Ya no podía seguir allí aunque quería ver su rostro y ella necesitaba mi corazón.
Noche tras noches intentaba reconocer los signos, este mundo de 10000 caras que me hacen verte mejor.
Ya no se si se volvió loca o es que a mi ya me da igual. Ambos estabamos atrapados en otro lado espacial.
Te reto a que puedas superarme. Ella dijo "es fácil rendirse pero necesitas algo mas que rezar" y se marchó dejando una estela profunda tras de si.
"Es fácil rendirse pero necesitas algo mas que rezar. ahora dejame ir y no besamos en otra parte".
Tuve que tomar la vía y marcharme de regreso y marcharme al lugar donde nacen los sueños alrededor de un montón de cohetes, lo relojes hacían 'cloc' y yo tenía que seguir adelante. No tenía otra opción.
Te reto a que puedas hacerlo mejor. "Es fácil rendirse pero que estarías dispuesto a hacer para demostrar amor?"
Muestrame tus habilidades y sabrás de lo que soy capaz de hacer. Tienes todo lo que necesitas en una sola noche. Oh baby, me estás escuchando? Quiero que vuelvas y todo sea como antes.
Te encontraré.
Me largo de aquí, no sé a donde ir pero sé donde estaré, no sé donde encontrarla pero sé que no puede esconderse.
"Atrapame si puedes"
Zoé, Galgo y yo :)
viernes, 25 de marzo de 2011
Lila
Varios amigos que han tenido la dicha de compartir con ella me han contado que siempre lleva consigo una libreta con cada foto y nombre de los chicos con que había estado,acompañado de su número correspondiente dicen que luego de descubrirlos con las manos en su preciada libreta le fin un CVP (Corte Violento de Patas) y que lo hicieron porque de todas formas dicho CVP estaba cerca.
Usualmente se podía ver a Lila y a sus amigas por pasillo del liceo en scouting mode (dicese de la forma en que el depredadór busca a su presa) en busca del próximo afortunado o la próxima víctima con el altavoz del teléfono desprendiendo los clásicos de Cindy Lauper.
Un día encontré a un pana muy euforian saltando y gritando diciendo que era el número 99 en el diario de aquella chica (por supuesto ya le dado su respectivo CVP). Y que la escucho hablando con sus amigas diciendo que ya había conseguido quién era el chico Nº100 y que a el sí le daría por completo.
Aún cuentan que el chico Nº100 en cuestión al principio no estaba dispuesto en ser un número más en la vida de Lila pero que al final cayó en la tentación y que aquel día tan esperado cuando Lila se iba a despojar de su aún sorprendentemente existente virginidad ella encontró en la habitación del chico páginas y más páginas que hablanban pestes sobre ella escritas con el puño y letra del ahora desafortunado tipo y me consta que cierto lo que dicen y es que Lila le dio golpes al tipo hasta por la cédula, me consta: aún tengo morados en el cuerpo y en la cara.
Todos los dias una
Y entonces fue un dia malisimo. El dia de de su boda fue un dia malisimo. Porque verse ya casi atado le cortaba las alas. A él que era un observador por naturaleza aunque un romantico forzado y un peor seductor.
Se asustó al verse allí frente al espejo con algo nuevo, algo viejo, algo prestado y algo azul. Y no era por la novia, la chica era la mas linda que habia conocido, de familia acomodada y a veces creia amarla y todo.
Pero hoy le habia pegado la presión, sabes asi como cuando quieres y esperas algo con todas tus ganas y cuando te llega no sabes que hacer, bueno asi se sentía él pero con la variante de que era el mismisimo dia de su boda.
Pensó en la cara que todos pondrian si no llegaba a aparecerse por la iglesia. Imaginó la cara rabiosa de su suegro y luego sintió su cuerpo estrellado contra cualquier cuneta de esta ciudad furiosa y eufórica, maleante y maleable, viral y versatil. Pensó otra vez: huir no era muy buena acción que se diga.
Pensó en Bruselas, la dichosa novia, este era el dia que habia esperado desde que estaba en aquel viente amniotico, recordó los 3 años y medio, recordó el primer SÍ y el el último YO TAMBIEN. Recordó lo bien que lucía con aquel ajustado vestido blanco que habia elegido y el cual habia visto pretendiendo romper cualquier tipo de superstición, esas que al final terminaron por pasarle factura.
Y no porque hubiese otra chica, no. O quizá si, potencialmente habia la posibilidad de otra persona. Sabes, a veces le entraban las dudas, él que se la pasaba mirando todo lo que podía, que por cada segundo que se olvidaba del compromiso habia 2 chicas que le robaban el aliento. Quizá y con 26 años aún era muy pronto, quiza por alli andaba la chica que destronaria a Bru como la chica de sus sueños.
Volvió a pensar en todo eso al menos 2 veces mas.
Afortunadamente el tiempo pasaba lento y para cuando terminaba de atarse la pajarita del traje habia decidido seguir con todo esto, que realmente queria a su novia de nombre belga e iba a enseriarse aunque eso significara perder todos los dias una.
jueves, 17 de marzo de 2011
Pim Pam Pum
Con motivo del lanzamiento de la reedición de Pim Pam Pum de Alejandro Rebolledo. Eric Colón, artífice de otro ícono cultural como fue la revista DeMente, escribió este texto de presentación.
Alejandro Rebollledo “El único finalista del premio Rómulo Gallegos que nunca se leyó Doña Bárbara”, era el slogan con el que se promocionaba Pin Pan Pun (con n) hace ya más de 10 años cuando salió por primera vez a la luz… El slogan aún sigue siendo bueno pero de repente perdió el efecto que escandalizaba en aquel tiempo. No tanto porque Alejandro se haya o no leído Doña Bárbara en estos últimos años, sino porque Pin Pan Pun se convirtió insospechadamente y en menos de una década, en un objeto de culto literario, en un fetiche prohibido para cientos de estudiantes de periodismo, nuevos escritores, compiladores y hasta falsificadores de oficio.Hace como 4 años Alejandro me llamó conmocionado porque había un mercado negro de pin pan punes en los centros de copiado de la UCV, que se la pasaban de mano en mano y hasta que había una materia electiva en la escuela de Comunicación Social, donde se discutía y analizaba la novela con las mismas rigurosidades académicas con que se estudiaba a los clásicos. Hoy hasta podríamos decir: Rómulo Gallegos, el único escritor venezolano que nunca se leyó Pin Pan Pun.
Sobre la novela se ha dicho de todo, que es el retrato perfecto de una generación, que abrió la puerta a una nueva ola de escritores locales, que inspiró tal o cual película. También, como siempre sucede frente a los nuevos hallazgos, se llevó su cuota de detractores que han querido restarle mérito y legitimidad a una obra que –hoy está más claro que nunca– fue la mayor y más estrambótica rareza de la literatura venezolana de finales de siglo.
Estoy seguro que Alejandro jamás quiso que fuera así, jamás, pero el tiempo modifica la óptica de las cosas y la valoración del hecho casual siempre termina convirtiéndose a la larga, en anécdota histórica.
Tenía poco tiempo trabajando con él cuando estaba escribiendo la novela, desde las trincheras de aquel semanario Urbe que descifró el mapa de una época. En ese momento, escribir una novela no estaba de moda. No era una opción viable de fama instantánea, ni aseguraba dividendos de ningún tipo. Como todo lo que se fabricó en ese bunker de terrorismo mediático juvenil que era en realidad las oficinas de esa redacción, la novela de Alejandro era el arma secreta de un ataque masivo que pretendía conmocionar a la sociedad y dibujar el curso de eso que llamábamos las nuevas tendencias. Aún me sigue resultando curioso cuanto han cambiado las cosas en tan poco tiempo, hoy, en pleno revival de los noventa, aquel grito ensordecedor que usábamos como mensaje no tiene mucho sentido y hasta puede resultar ingenuo. Sin embargo, la historia de Julián, Caimán, Chicharra, Luis o Juan Power es la historia de muchos de los que estamos hoy aquí y de los que vendrán más allá. Es cómo el loop de una tragedia griega infinita y universal, una canción eterna que sigue recordándonos siempre la misma melodía.
Al mismo tiempo, Pin Pan Pun es el sustrato concentrado de la propia experiencia de vida de su creador, ahí coinciden, lugares y situaciones que se desprenden del ejercicio contemplativo de su propio entorno, de su momento. Como dice Bret Easton Ellis no hay una línea que separe lo biográfico de la ficción porque la experiencia de vida es una sola. Poco tiempo después de que salió el libro no fueron poco los incautos lectores que se acercaron a Alejandro a preguntarle: “Chamo, ¿esta que sale aquí es mi jeva?, que bolas tienes tu…”, o peor aún: “¿Es verdad que te acostaste con el peluquero?”, incluso recuerdo a un Alejandro preocupado por extrañas amenazas anónimas en algún momento. Diría que hasta más que preocupado, en esa suerte de histeria glorificadora que lo caracteriza cuando sus actos de provocación cumplen su cometido. Los mismos que le han causado enormes reconocimientos y otras veces también, odios innecesarios. Sin embargo, frente a todos ellos, el parece siempre tener la misma respuesta: “Me cago de la risa”.
Conocí a Alejandro mucho tiempo antes de Pin Pan Pun, en una época en que el nihilismo que lo perseguía se parecía demasiado al de ciertos personajes de esta novela. Desde que yo era una adolescente, fui un apasionado de leer todo lo que escribía en El Nacional, en aquel Feriado tabloide y legendario que luego se convirtió en revista: la historia de John Holmes, el actor de las películas pornográficas de los setenta que extrañamente, lo perdió todo por tener un pene de 33 centímetros, el caso de un punketo neonazi que era negro y vivía en Quebrada Honda, el Dj que se transformaba en vampiro con una capa no sé en que local de los ochenta, el escándalo de drogas de un grupo de rock sinfónico que ensayaba en El Cafetal. Me volví un fanático de aquellas historias que siempre identificaba instantáneamente. Donde había secretos retorcidos, modas inexplicables o crónicas sobre la ruina chic, ahí estaba la firma de Alejandro. Siempre. Siempre.
Después con el tiempo y ya adentrado en los terrenos de la ficción esas historias se volvieron cada vez más extravagantes: lesbianas androides, alienígenas atacando el Parque Central y ese cuento que tanto me cautivó sobre las andanzas de Fliflí y Flofló, una pareja de delfines enfermos atrapados en un circo ecuatoriano. Así de insólitas han sido siempre sus historias, las de antes, las de hoy, las inventadas y las más auténticas y personales también.
Hace un par de semanas me enteré de que se iba a reeditar Pin Pan Pun y me pareció una noticia fantástica en medio de tanta desolación. Los que conocemos a Alejandro sabemos que tiene varios manuscritos perdidos en algún cajón, por ahí hasta hay un poemario que se llama Romances del distroy que es toda una sensación en internet. Pero que Pin Pan Pun esté otra vez a la venta gracias a la iniciativa de Ulises Milla y la editorial Puntocero es reconfortante.
En este instante, esta novela está traspasando la frontera generacional. Sin señales de deterioro, el texto sobrevive intacto al paso del tiempo y resucita –después de un poquito más de 3 días– con esta nueva edición. Estamos frente a un síntoma inequívoco de la necesidad en la búsqueda del discurso, de un discurso, de cualquier discurso.
Pin Pan Pun reaparece en un tiempo hueco y reguetonero, del que todo lo que podemos decir no vale la pena ni decirlo porque ya esta dicho en Wikipedia o mañana seguro lo dicen en Twitter. De lo que si estoy seguro es que Alejandro nunca se quedará sin decir nada. Creo que fue ayer cuando le dije a mi querido amigo que quizás los lectores no iban a recibir muy bien que hubiera cambiado el título de la novela sustituyendo las “enes” por las “emes” y me respondió con lo mismo de siempre:
“Que no sea marico nadie”.
Fuente: edicionespuntocero.com/page/2
viernes, 11 de marzo de 2011
La Espera por Cristian Fuentes
El ser humano esta acostumbrado a quedarse esperando y al culminar el día solo les da por resignarse y seguir esperando sin hacer nada.
Luego platicamos unos con otros y hablamos de que hay que esforzarnos para lograr nuestras metas, de que sin esfuerzo no se logra nada y que hay que conformarnos incluso agarrar aunque sea fallo. Pero, no nos conformamos y terminamos siendo “analfabeta de nuestros propios pensamientos” y palabras.
Si con esfuerzo podemos lograr lo que queremos, porque cada día que pasamos de espera no nos esforzamos, para que con un poco de esfuerzo algún día en nuestra espera obtengamos lo que queramos!
La frase: “analfabeta de pensamientos” es de un cantante, simplemente que en esta corta nota me pareció adecuada de usar…
martes, 8 de marzo de 2011
Corazón/Amor
Quién dijera la frase "mi pancreas segrega insulina por ti", o "produzco mucho fluido nasal si tú no estas" seguramente sería tildado de loco, demente y esquizofrénico por entes insulzos que desconocen que todo eso significa lo mismo.
Cupido seguro nos lanza su flecha a la rodilla y la gente ociosa ya comienza a decir que él apunta su flecha a la parte izquierda de nuestro pecho. Sí, quizás el corazón late más rápido cuando estamos con esa persona pero cabe la posibilidad que suframos de una taquicardia que desconocemos.
¿Por qué dibujar 2 corazones juntos y no 2 riñones? Sí según nuestros organismos se unen por completo. Así que diganle adiós a las cadenitas con forma de medio corazón y denle la bienvenida a las cajas de bombones con forma de pulmón. Y esa es otra cosa, regalale chocolates para luego cuando terminen tengas como excusa que está tan obesa como un manatí.
PD: La única relación que veo entre el corazón y el amor es que, que te engañen duele tanto como un infarto al miocardio. That's All.
Teoría Hibrida
Mientras tanto tú hurgas en tus adentros buscando esos requisitos o necesidades básicas que hacen que no todas las personas estén hechas para ti ni tú estés hecho para todas las personas yo me leere esto mil veces para ver sí por fin me convenzo. Me despido con una frase técnica: cuando te toque no te quites y cuando no te toque no te pongas.
Sarah Valentine
Lloré los primeros tres días. Al cuarto no te recordé, pensé que tú querías que fuera así, que yo no pensara en que lo habías para verme desangrar sino que lo hacías porque era mil y un veces mejor despedirnos cuando todo era color de rosa, "ferpecto" como acostumbrabar a decir, que era mejor recordarte con buenos ojos antes de recordarte con la sangre hirviendo y rabia brotando de mis poros, luego de ver como nuestra relación, de a poco con poco, iba perdiendo color. Cuando me recuperé tampoco quise desechar ninguna de tus cosas, quería recordar que eras más que una ilusión creada por mi cerebro en un momento de soledad desesperada. No, quería que tú fueras real, tan real como la caricias que me dabas y las palabras que dejabas a medio salir. Nunca pretendi pensar algo mal de ti, quizás de mi pero nunca de ti, aunque reconozco que todo yo era producto de toda tú.
Pisaste fuerte, dejaste huella Sarah Valentine.
De Mérida a tus oídos: 20000 leguas cuadriláteras
De Mérida a tus oídos: 20000 leguas cuadriláteras
Charliepapa, una de mis bandas nacionales favoritas, acaba de publicar el sucesor de su ultrafinisimo album debut, el disco nuevo se llama 20000 leguas cuadriláteras y esta disponible completamente gratis en www.charliepapa.com
Borroso: 1er sencillo del album y no podria de ser de otra manera. Quizas mas rockera de lo que nos tienen acostumbrados, demuestran que las letras siguen siendo el eje principal de su musica. Aún se puede escuchar en algunas emisoras.
Papas Maquetas: Un buen intro de bajo. Aqui la musica supera a la letra. No es mala sólo que un poco normal. Buen título.
Vuelta en L: Ritmo rápido, canción lenta. Habla de no volver ni a la rutina ni al pasado. Es lo mismo pero no es igual.
Carnaval: Una bocanada de aire fresco al disco. Quien no reconozca la evolución está oyendo otro disco. Una crítica a la careta que usamos todos los dias. Está para ser sencillo.
Diste: Intro acústico. Una equivocación es casi siempre cosa de 2. Buena letra pero le falta algo.
Avena: La mas larga hasta ahora. No aporta de nada.
Claribel: Sueños y silencios. Necesariamente buena después de Avena. Aún no regresa la energía de las primeras 4 canciones.
Hamada del Draa: Buen Intro. Regresó la fuerza. Groseria. Letra muy buena, batería fuerte. Título extraño, canción excelente. Esa es la fórmula charliepapiense.
Zamuro: Nostalgica. Una de las mejores del disco. La vida sigue.
Voy Tranquilo: Parece que hubo placer, al nacer, ver crecer. Todo puede suceder en el camino por recorrer. Frases ocultas al final. Muy buen cierre a un mejor disco.
34 minutos, 43 segundos
Los merideños lo volvieron a hacer.! Un muy buen disco que si bien tiene momentos flojos hay varias cosas que son más que rescatables.
Quizas menos sorpresivo que su antecesor pero definitivamente bueno.
Momentos resaltantes: Borroso, Carnaval, Hamada del Draa y Voy Tranquilo.
Puntuación: 4.1/5
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